En la cuarta semana seguimos metidos en el mundo de las apps, pero esta vez el profe nos subió un level. Hicimos varias pruebas: una app con acelerómetro (sí, esas que reaccionan al movimiento del cel), otra de monitoreo y hasta una con sensor de luz. Fue loco ver cómo el teléfono respondía a lo que programábamos, como si de verdad le estuviéramos dando superpoderes.
Después de terminar con eso, el profe nos juntó en grupos de cuatro (menos mal quiso, porque ya me veía separándome de mis amigas 😅) y ahí nos lanzó la bomba: nuestra tarea de promedio iba a ser crear una app para una empresa. Nosotras elegimos Dunkin’ Donuts, porque quién le dice que no a unas donas. 🍩 Ahí empezamos a cranear qué funciones tendría, cómo la íbamos a armar y básicamente a darle forma a la idea. Fue como nuestro primer acercamiento a un proyecto “más real” y no solo ejercicios de prueba.